Las opiniones entregadas por los profesores fueron distintas e incluso contrapuestas. Pero en lo que coincidieron todos fue en la necesidad de abrir un diálogo serio que contribuya a explorar los términos y límites que queremos dar a nuestra vida en sociedad.
Para el decano de Derecho de la U. de los Andes, Mario Corral, a las relaciones homosexuales no se les puede privilegiar con un estatuto especial, porque eso sería darle una institucionalidad que no tiene. “Acá (con el debate de las uniones homosexuales) estamos discutiendo cuál es el modelo de familia que queremos”. En este sentido, señaló, quienes postulan a una relación polígama también podrían exigir en el futuro un estatuto especial.
No obstante, para el profesor de la Facultad y organizador del debate, Mauricio Tapia, se trata de regular el aspecto patrimonial de las convivencias, sean heterosexuales u homosexuales, que no están dentro del matrimonio. Es una necesidad social a la que el Derecho Civil debe entregar respuesta. No se trata de igualar estas relaciones con el matrimonio, porque la función del Derecho es seguir los cambios sociales, no provocarlos ni impedirlos.
El representante de “Libertades Públicas” y profesor de Derecho U. de Chile, Julián López, argumenta que lo que debe primar es el principio de igualdad y no discriminación, lo que sobrepasa los intereses particulares de una minoría. Así, a su juicio, se debe reconocer legalmente el matrimonio homosexual, porque no se puede dejar fuera de la protección que significa el matrimonio a un grupo de personas. Habría ciudadanos de primera y segunda clase. Reconocer una unión y no derechamente un matrimonio es inconsistente, afirma.
Ninguna de las anteriores. Ni unión civil ni matrimonio homosexual, sostiene el profesor de la Facultad,Claudio Illanes. Para el académico no es necesario establecer estatutos especiales, pues sin éstos igual se pueden solucionar temas patrimoniales. Además, llegar a incluir un régimen patrimonial para las uniones homosexuales nos llevaría a cambiar radicalmente nuestro sistema sucesorio, el cual está basado en la relación filial (padre, madre, hijos, parientes). En ese sentido, se pregunta sobre qué pasaría con el patrimonio de homosexuales que están casados y tienen hijos, además de una pareja.
Más allá de las opiniones e incluso propuestas, lo cierto es que el debate jurídico recién comienza. De hecho, el Movilh, una de las organizaciones más representativas de la comunidad homosexual, está preparando un proyecto de ley para regular las uniones homosexuales. Así lo sostuvo el presidente de dicha organización, Rolando Jiménez, quien confrontó sus ideas con el abogado Jorge Reyes, del Movimiento Pro Vida, durante la primera jornada del debate convocado por el Departamento de Derecho Civil de la Facultad.
Este encuentro de dos días, que concluyó el jueves 23 de marzo, dan cuenta que Derecho U. de Chile, como “institución laica, pluralista y tolerante” siempre está dispuesta a ser sede de las más importantes discusiones”, como lo fue en tiempos del decano Alessandri, cuando se discutieron en la Facultad las denominadas “leyes laicas” y en una época más reciente, cuando se abordó la necesidad de igualar los derechos de los hijos nacidos dentro y fuera del matrimonio, dijo el vicedecano, Salvador Mohor.