Libertad para escoger la vida que queremos implica también que cada uno pueda decidir sobre su muerte. Esta tesis, planteada durante un seminario desarrollado en Derecho U. de Chile, involucra acceder a una muerte digna o, incluso, el suicidio. Así lo plantearon, entre otros, el profesor Gonzalo Figueroa.
En la actividad, organizada por el académico del Departamento de Derecho Privado y experto en materias de bioética, se debatió desde diversas perspectivas filosóficas, médicas y jurídicas, el Derecho a la vida y a la muerte.
Para el profesor Figueroa, si reconocemos que la vida pertenece a quien la ostenta, su titular tiene derecho a decidir cuando terminar con ella. Y aunque desde la perspectiva de los valores religiosos esto no es compartido, el académico manifiesta que si bien dichas posiciones son respetables, no son universables.
Al respecto, la profesora de la Universidad de Barcelona, María Casado, señaló que no se puede sostener el derecho a la vida en contra de la voluntad de quien la detenta. Insistió en este sentido en la autonomía y libertad para elegir un modelo de vida. No obstante, advirtió que si todos estuviéramos de acuerdo en estas materias, no habría desarrollo de la filosofía política, la bioética y la filosofía moral.
Tema debatible
Por su parte, Ángela Arenas, de la U. Finis Terrae, sostuvo que los avances tecnológicos en la medicina permiten intervenir en la vida y la salud. De esta forma, concluyó, el Derecho está llamado proteger la vida biológica procurando defender la paridad entre los seres humanos.
Precisamente, la profesora y magistrado argentina, Aída Kemelmajer, abordó la jurisprudencia existente sobre eutanasia en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Algo que dejó en evidencia el debate existente sobre la materia.
Sobre las enfermedades terminales, desde una perspectiva del ejercicio de la medicina, expuso Lydia Guisan, de la Universidad de Barcelona. Lo propio hizo su colega de la misma casa de estudios, María Jesús Buxó, al abordar la muerte desde un enfoque de la bioética y la interculturalidad.
El seminario donde se debatieron estas materias contó con el patrocinio de Derecho U. de Chile; el Observatorio de Bioética y Derecho y la Cátedra UNESCO de Bioética, ambos de la U. de Barcelona; el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación de España y la Agencia Española de Cooperación Internacional.