Noticias

Academia global

Cooperación internacional como eje para proteger al consumidor

Cooperación internacional como eje para proteger al consumidor

La estrategia de precios bajos que siguen algunas compañías lleva a que en muchos países se ofrezcan en el mercado productos de baja calidad. En algunos casos pueden perjudicar la seguridad de las personas. Esta realidad hace necesario que los distintos organismos de protección al consumidor se coordinen, tanto a nivel local como global, sostiene la directora del Instituto Nacional de Consumo de España, Etelvina Andreu.

Es por ello que la cooperación internacional es uno de los ejes de su organización, junto con la promoción de normas de defensa y apoyo a organizaciones de consumidores, que son entidades colaboradoras en la misión de proteger la seguridad de las personas a la hora de adquirir un bien o servicio.

La profesional, que ofreció una clase magistral invitada por el Sernac y la Facultad, también abogó por un mercado más transparente, donde abaratar los costos de un producto para ofrecerlo a menor precio no perjudique su calidad al punto de que represente un riesgo.

El profesor de Jaime Lorenzini, quien dicta la cátedra de derecho del consumidor en la Facultad, coincidió en la necesidad de articular a diversos actores, intercambiando información y desarrollando estándares de seguridad uniforme, de manera que productos que no son permitidos en un país tampoco lo sean en otro.

En el plano local, el académico sostuvo que aún las sanciones por infringir la ley del consumidor son bajas. A su juicio, muchas veces las multas se incorporan como parte de los costos de un producto o servicio por representar un porcentaje marginal que hace más conveniente no cumplir estándares.

Este fue parte del análisis que los especialistas presentaron ante la audiencia, que también tuvo la oportunidad de participar a través de preguntas.