La Dra. Pilar Moraga, directora del Centro de Derecho Ambiental y del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) de la Universidad de Chile, participó recientemente en el programa radial Rocadictos de Radio Universidad de Chile, instancia en la que abordó su participación en la Conferencia de las Partes sobre Cambio Climático (COP30) y los principales debates que marcaron esta cumbre internacional.
Durante la conversación, la profesora Moraga explicó que la COP30 se enmarca en el proceso de negociación global para implementar los compromisos del Acuerdo de París. En este contexto, destacó la presencia del CR2, cuyo mandato como centro FONDAP incluye incidir en políticas públicas y servir como un puente entre la evidencia científica y la toma de decisiones. La investigadora afirmó que el centro participó como secretaría técnica y científica, presentando métricas elaboradas para medir el impacto de acciones de adaptación implementadas por actores no estatales en la calidad de vida de la población. Señaló que esta COP fue especialmente relevante, ya que permitió mostrar resultados en esta materia.
Consultada sobre ejemplos de estas métricas, la Dra. Moraga mencionó iniciativas de modernización de sistemas de riego en comunidades afectadas por la escasez hídrica. Explicó que, implementar medidas para favorecer la recarga de napas subterráneas y asegurar el suministro de agua en temporadas futuras, representaría adaptaciones virtuosas que mejoran las condiciones de vida. En contraste, advirtió que existen otras medidas de adaptación que pueden generar efectos negativos, como el aumento en el consumo eléctrico derivado del uso masivo de aire acondicionado.
Respecto a los resultados de la COP30, la académica señaló que la declaración final generó decepción en la comunidad científica debido a la falta de compromisos concretos en la eliminación de combustibles fósiles y la reducción de la deforestación. Esto plantea dudas. No obstante, subrayó la importancia del diálogo multilateral, destacando que sin estos espacios no existiría posibilidad de avanzar hacia acuerdos globales. Asimismo, resaltó que la cumbre incorporó un enfoque ampliado de justicia climática, vinculado al acceso a la justicia, especialmente tras el reciente pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia que reconoce al Acuerdo de París como jurídicamente vinculante.
La conversación también abordó el escenario geopolítico marcado por conflictos bélicos y el incremento del gasto militar, factores que han desplazado la atención y recursos destinados a la acción climática. La profesora Moraga alertó sobre denuncias de lobby orientadas a frenar avances regulatorios en el marco de la COP30. Desde la perspectiva científica, valoró la declaración de Chile en apoyo al fortalecimiento de la ciencia regional y destacó la necesidad de consolidar una comunidad científica latinoamericana más articulada.
Finalmente se consulta a la panelista sobre los compromisos futuros. Al respecto, recordó que los países deben actualizar y presentar sus Contribuciones Nacionalmente Determinadas (NDC) cada cinco años. El desafío ahora es avanzar hacia su efectiva implementación y establecer mecanismos de rendición de cuentas.